Un pequeño salón de baile a finales de los 70, íntimo y secreto, es el lugar de reunión de una serie de curiosos personajes que tratan de encontrar la felicidad que no tienen en sus vidas.
Sin embargo, ese pequeño paraíso, a medida que lo vamos conociendo, se descubre como un lugar en el que los roles asignados a hombres y mujeres dibujan una tensa relación que progresivamente va degenerando en un círculo de contradicciones personales que demarcan una inconformidad clara con cómo han decidido vivir sus vidas. Se trata de una realizar una deconstrucción simbólica del sistema patriarcal dominante, difícil de percibir por las personas.
Tras la representación, se dinamiza un debate en el que se abordan las cuestiones de género relevantes que se puedan plantear a partir de lo visto sobre el escenario.
Obra dirigida a público adulto